Los expertos en liderazgo pedagógico destacan la necesidad de que el líder director de la institución educativa dedique más tiempo a tareas pedagógicamente ricas, tales como coordinar, impulsar, formar, alentar y, fundamentalmente, convertirse en un ejemplo.
El director debe enfocarse en las prácticas que creen un contexto para un mejor trabajo del plantel docente y, por consiguiente, de todo el centro escolar. Esa debería ser una cualidad destacada de su liderazgo.
Todo lo que se propone desde la dirección escolar tiene naturaleza enraizadora. Es decir, sus decisiones llegan a formar parte de la cultura y el ADN institucional, de lo que hace singular a la institución. El ideal es que, cuando el director educativo abandone la institución, los que permanezcan en ella puedan profundizar los objetivos.
El equipo directivo debería dirigir los procesos de enseñanza aprendizaje, orientando su tarea hacia la creación de entornos que apoyen y faciliten la formación del alumnado, de los docentes y de los coordinadores. Especial atención debe dar al profesorado, pues los docentes deben enseñar a sus alumnos a aprender. No se trata simplemente de transmitir los contenidos, actitudes y destrezas del currículo. Se intenta lograr un doble objetivo: formación y rendimiento.
La principal tarea de los equipos directivos ha de ser lograr que el profesorado marque diferencias significativas con todos los alumnos. Podemos mencionar cuatro conjuntos de prácticas del liderazgo directivo:
1.Orientar la acción y generar ilusión por proyectos compartidos.
2.Entender a las personas y ayudarles en su desarrollo profesional.
3.Acomodar (rediseñar) la organización para que cumpla sus fines.
4.Dirigir los procesos de enseñanza y aprendizaje.
Un líder educativo cristiano debe ser un representante del Líder divino. Tiene una misión sagrada en donde le toque estar y no debe perder de vista el horizonte de servicio, verdad y guía que caracterizó a Cristo. Es en el servicio a los otros donde se halla contentamiento. De esta forma, el trabajo diligente de un líder cristiano refleja a su Señor.
“En cambio, el que practica la verdad se acerca a la luz, para que se vea claramente que ha hecho sus obras en obediencia a Dios” Juan 3: 21 (NVI, versión online).